25 de agosto de 2025

Medio Ambiente utiliza drones para el seguimientos de aves reproductoras en una iniciativa innovadora y eficaz dentro de la ornitología

 

El uso de esta tecnología se ha incorporado para apoyar y facilitar la labor de detección y conservación de colonias reproductoras de garza imperial en la Comunidad

Garza en La Nava
Garza en La NavaLa RazónLa Razón

La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación de Territorio implementa durante este año 2025 el uso de drones en los seguimientos de aves reproductoras incluidas en el Plan de Monitorización del Estado de Conservación de la Biodiversidad en Castilla y León. El uso de esta tecnología, tal y como explicaron fuentes del departamento a Ical, es una herramienta innovadora y eficaz dentro de la ornitología y la conservación de la biodiversidad.

En concreto, en Castilla y León se ha incorporado para apoyar y facilitar la labor de detección y conservación de colonias reproductoras de garza imperial en la Comunidad.

El uso de drones se está extendiendo en el ámbito del seguimiento ambiental, debido principalmente a tres factores claves diferenciales: “La facilidad de uso y ubicuidad, el ahorro en costes en la toma de datos y la obtención de datos de alta resolución espacial y temporal, con la posibilidad de generar cartografía digital integrable a un Sistema de Información Geográfica (SIG)”, afirman fuentes de la Consejería.

En el ámbito del estudio y conservación de fauna y flora silvestre, se trata de una tecnología cada vez más utilizada por investigadores, gestores del medio natural, empresas y ONG medioambientales, principalmente para realizar diferentes actividades como el seguimiento de poblaciones, seguimiento de parámetros reproductores, caracterización del hábitat, etc.

En este sentido, Castilla y León es una de las comunidades autónomas con mayor riqueza florística, faunística y ecológica de España. su adecuada gestión “requiere del conocimiento de su estado de conservación”, motivo por el cual desde hace años se han llevado a cabo trabajos de mejora del conocimiento, censos y seguimientos anuales de algunos espacios naturales protegidos y censos a nivel provincial o autonómico de determinadas especies, trabajos incluidos en el Plan de Monitorización del Estado de Conservación de la Biodiversidad en Castilla y León.

Aumenta la población de garza imperial

En este sentido, esta iniciativa se está desarrollando para realizar los censos de garza imperial (Ardea purpurea), una de las especies presentes en la fauna española, que nidifica, entre otros lugares de Europa y Eurasia, en tierras de Castilla y León. Desde principios de primavera, recién llegadas de sus cuarteles de invernada en el África transahariana, se puede observar en ríos y humedales de la Comunidad, donde se localizan sus colonias de nidificación.

Durante estos últimos años sus principales colonias reproductoras se han localizado en la laguna de La Nava (Palencia) y en el embalse de San José del Duero o de Castronuño (Valladolid). Al parecer, esta especie nunca tuvo una amplia distribución, aunque existe información sobre una importante colonia que podría haber superado el centenar de parejas en la antigua laguna de La Nava (Palencia), localidad que tras la recuperación parcial del humedal fue recolonizada por esta especie.

Aparte de esto, existe un pequeño número de localidades con presencia de pequeñas colonias o de nidificación de parejas aisladas en distintos puntos de la Comunidad, siempre asociadas a diferentes masas de agua con alta cobertura de vegetación palustre que a menudo dificultan el seguimiento de la especie. En el anterior censo regional realizado el pasado año se detectaron un total de entre 114 y 123 parejas reproductoras en 13 localidades.

Durante el censo de esta pasada primavera se han localizado entre 202 y 214 parejas en 14 poblaciones de seis provincias. La colonia más numerosa se localiza en las graveras de Coreses (Zamora), donde gracias a la metodología de censo mediante el uso de drones se ha logrado una mejor prospección del área óptima para la cría de la especie. En dicho humedal se han localizado entre 46 y 49 parejas, que junto con las 30 parejas de la población reproductora del embalse de Soto de Cerrato (Palencia) y las 28 parejas localizadas en las graveras de La Cistérniga (Valladolid), suman la mitad de las parejas reproductoras detectadas de esta especie de garza durante el último censo autonómico.

¿Cómo funcionan estos drones?

Durante el seguimiento anual de esta especie en 2025, la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación de Territorio, a través de la Dirección General de Patrimonio Natural y Política Forestal, ha incorporado el uso de drones para el seguimiento de la población reproductora de garza imperial y otras ardeidas en ríos y humedales de la comunidad.

Para el desarrollo de esta tarea, los agentes medioambientales y celadores preseñalizan los indicios de reproducción de la especie (entradas y salidas de ejemplares adultos), que se realiza con observaciones directas desde puntos de observación con prismáticos y telescopios y posteriormente en gabinete se diseña el trazado de vuelo. Una vez definido el vuelo, los drones sobrevuelan a una distancia de 20 metros los terrenos donde previamente se han detectado indicios de reproducción de la especie, y en un tiempo reducido se toman las imágenes necesarias para el seguimiento de las garzas reproductoras. Además, mediante su utilización es posible generar secuencias de vídeo de las colonias para valorar también las presiones y amenazas a las que están sometidos y en un futuro detectar cambios y alteraciones en el hábitat. Posteriormente se revisan todas las imágenes obtenidas para obtener una estima del número total nidos ocupados en cada colonia de nidificación.

La efectividad del uso de drones en el seguimiento de garzas imperiales ha sido evaluada en varios estudios científicos, con resultados muy positivos en términos de precisión, eficiencia y reducción del impacto sobre las aves. Este trabajo complementario consigue un resultado mejor que permite la detección de un mayor número de parejas reproductoras, y realizar censos más precisos sin perturbar a las aves, reducción significativa del tiempo de muestreo comparado con métodos tradicionales y un bajo nivel de perturbación si se respetan distancias mínimas y se evitan vuelos verticales directos.

A partir de estos trabajos iniciales, la Consejería plantea futuros estudios que permitan evaluar cuantitativa y cualitativamente la eficacia de este método en el seguimiento de especies, obtener datos adicionales sobre el estado del hábitat y su evolución, así como la ampliación a nuevas especies de difícil detectabilidad o seguimiento por encontrarse en zonas muy extensas o de difícil acceso.

Plan de Monitorización

En el marco de la planificación y la gestión de los lugares incluidos en la Red Natura 2000 se desarrolla el Plan de Monitorización del Estado de Conservación de la Biodiversidad en Castilla y León, que aborda principalmente el seguimiento y evaluación del estado de conservación de los hábitats de interés comunitario y las especies incluidas en el anexo I de la Directiva Aves, anexos II, IV y V de la Directiva Hábitats, el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y en el Catálogo Español de Especies Amenazadas.

El número total de especies objeto de seguimiento se sitúa en 323 taxones de fauna en Castilla y León, lo que da idea de la magnitud del programa regional de seguimiento de fauna protegida.

Durante este año 2025 se ha continuado con el trabajo de seguimiento de grupos de especies como aves acuáticas (invernantes y migradoras), ardeidas (avetoro, garzas coloniales y especies afines), aves galliformes (urogallo cantábrico) aves forestales amenazadas (águila imperial ibérica, cigüeña negra, buitre negro y milano real reproductor e invernante), aves esteparias (avutarda, ganga ibérica , ganga ortega y sisón), aves rapaces rupícolas (águila perdicera, buitre leonado y alimoche), aves rapaces diurnas no amenazadas, mesomamíferos carnívoros, oso pardo cantábrico y lobo ibérico.

El seguimiento del estado de conservación de las diferentes especies que habitan en Castilla y León es necesario, según las mismas fuentes, para dar respuesta a las obligaciones comunitarias derivadas de las directivas Hábitats y Aves, que obligan a los países miembros a informar cada seis años a la Comisión de la Unión Europea sobre el estado de conservación de los taxones de interés comunitario incluidos en los anexos de la Directiva Hábitats y sobe todas las especies de aves silvestres de presencia regular en cada país miembro.


Los trabajos de la IA para sostener el mundo

 Probablemente usted ya use ChatGPT para pedirle una receta, resolver una duda, preparar una clase o entender un tema complicado. Pero el poder de las IA generativas va mucho más allá. 

En laboratorios, centros tecnológicos e industrias de todo el mundo, estamos utilizándolas para afrontar algunos de los mayores desafíos del planeta: generar energía de forma más eficiente, reducir las emisiones del transporte y diseñar materiales con menor impacto ambiental. Las IA están ayudándonos a imaginar soluciones posibles a las que los humanos no podemos llegar solos.

En mi campo de especialidad, la inteligencia artificial está dando forma conceptual a los materiales con los que construiremos un futuro que pueda ser sostenible. 

Materiales en condiciones extremas

Uno de los grandes retos de la transición energética es encontrar materiales capaces de soportar condiciones extremas. Lo vemos, por ejemplo, en la energía solar de concentración, una interesante alternativa de renovables que almacena calor en sales fundidas para generar electricidad incluso cuando no hay sol. 


















Las torres de energía solar de concentración de Ivanpah. Es una de las mayores plantas termosolares del mundo, situada en el desierto de Mojave (California, Estados Unidos) Wikimedia commonsCC BY

Hoy se utilizan sales de nitratos que operan hasta 560 °C, pero se investigan cloruros fundidos, capaces de trabajar a 780 °C y almacenar más energía. El problema es que a esa temperatura se vuelven altamente corrosivos, y los metales convencionales no resisten durante largos periodos. 

Algo parecido ocurre en el sector de la aeronáutica. Las turbinas de los aviones funcionan a temperaturas altísimas: cuanto mayor es la temperatura, mayor la eficiencia, menos combustible se consume y menos emisiones se generan. 

Pero superar los 1 000 °C exige materiales que no se deformen ni se oxiden bajo condiciones extremas. En ambos casos –turbinas y sales corrosivas– necesitamos metales que aún no existen en el mercado.

Las aleaciones de alta entropía

Aquí entran en escena las aleaciones de alta entropía, un tipo de materiales que desde 2004 ha revolucionado la metalurgia

A diferencia de las aleaciones tradicionales, formadas en torno a un elemento principal como hierro o níquel, estas combinan cinco o más elementos en proporciones similares. Este cambio abre un espacio de diseño casi infinito abarcando un gran número de combinaciones posibles en toda la tabla periódica, lo que da lugar a propiedades diversas como gran resistencia mecánica a altas temperaturas o excelente comportamiento frente a corrosión y oxidación.

La IA permite evaluar millones de composiciones de forma rápida, identificando las más prometedoras y reduciendo el tiempo necesario para pasar de una hipótesis a un material real. Lo que antes era un laberinto inabarcable ahora se recorre con brújula.

Por ejemplo, si lo que buscamos en las centrales termosolares es una aleación capaz de resistir los cloruros fundidos a 780 °C, o si pretendemos mantener su resistencia mecánica por encima de los 1 000 °C en una turbina de un avión, la IA puede cribar el espacio de opciones y señalar los candidatos más viables. 

La dependencia de China para las baterías

También en el campo de las baterías se hace evidente la urgencia de innovar en materiales, y las IAs están trabajando en ello. 

La creciente electrificación del transporte y el despliegue de tecnologías de almacenamiento energético dependen hoy en gran medida de materiales críticos como el litio, el cobalto, el níquel o el grafito, empleados en baterías de iones de litio.

Sin embargo, estos elementos no solo plantean desafíos ambientales y tecnológicos, sino también geopolíticos. 

La cadena de suministro está fuertemente concentrada, con China controlando buena parte del procesado y refinado globalde muchos de estos materiales estratégicos, así como una influencia creciente sobre la extracción de cobalto en África Central. Esta dependencia limita la autonomía tecnológica de regiones como Europa y las expone a tensiones comerciales o restricciones de exportación, como ya ha ocurrido con otros metales clave como el galio o el germanio.

El desarrollo de nuevas composiciones que reduzcan o eliminen la necesidad de estos elementos se ha convertido en una prioridad científica e industrial.

Son esenciales nuevos materiales para electrodos o electrolitos sólidos, más abundantes, reciclables y con menor huella ambiental, para garantizar baterías más sostenibles, accesibles y resistentes a los vaivenes del contexto internacional. 

Solo con IA

La inteligencia artificial, aplicada al diseño de materiales, abre una vía prometedora para identificar alternativas con propiedades funcionales similares, pero fabricadas a partir de elementos más seguros, más locales y más sostenibles.

El reto, sin embargo, es explorar ese océano de combinaciones. Con métodos tradicionales basados en ensayo y error resultaría lento y costoso.

El alimento de las inteligencias artificiales

Diseñar con inteligencia artificial no significa pulsar un botón y obtener la respuesta perfecta. Todo depende de los datos disponibles. Generar información fiable mediante experimentos, estandarizar bases de datos y compartir resultados entre centros de investigación es hoy una prioridad. Sin esa base, los modelos de IA no pueden aprender ni producir predicciones sólidas.

Cuando no se dispone de datos experimentales, otra herramienta esencial es la simulación computacional. Modelos físicos y químicos permiten anticipar cómo se comportaría un material bajo ciertas condiciones y generar datos sintéticos que alimentan a los algoritmos de IA. De este modo, el progreso no depende solo de lo ya probado en el laboratorio, sino también de lo que puede predecirse con ayuda de la física.

Descubrimientos guiados por el diseño

Este enfoque encaja con lo que se denomina design-driven discovery, o descubrimiento guiado por el diseño.

A diferencia de la lógica tradicional –llamada material-driven–, en la que se parte de un material existente y se observa qué propiedades tiene, el enfoque design-driven comienza definiendo qué propiedades necesitamos (por ejemplo, resistencia a la corrosión a 780 ⁰C en el caso de los paneles solares) para buscar después las combinaciones químicas capaces de cumplirlas. 

En lugar de descubrir lo que un material puede hacer, diseñamos directamente el que necesitamos que lo haga. Y la inteligencia artificial es la herramienta que hace posible ese giro.

La IA es una aliada estratégica si queremos que el mundo se sostenga.