Como dice el diario The Telegram, ésta es una historia sobre lo pequeño que es este planeta y lo maravilloso que puede llegar a ser cuando la gente está por la labor. En concreto es la historia deColby Chipman, un niño autista de 7 años cuyo dibujo ha terminado en la Antártida gracias al sentido del humor de su familia y al buen rollo de los usuarios de Reddit. (Seguir leyendo)
La historia comienza en octubre del año pasado, cuando la madre de Colby golpeó accidentalmente con el pie un pingüino de juguete que el niño había dejado en el pasillo. Después de contemplar el atropello, Colby se fue a su habitación, cogió lápiz y papel y pintó un cartel que dejó pegado en la nevera con un claro mensaje: “Prohibido dar patadas a los pingüinos”.

Según relatan sus familiares, Colby se llevó una buena alegría cuando le contaron la historia de su cartel. Su historia se ha hecho tan popular que van a seguir vendiendo camisetas del pingüino en la web nokickingpenguins.org y donarán todos los fondos a la asociación nacional del autismo en EEUU. Mientras tanto, Colby sigue haciendo dibujos en su habitación, ajeno a todo el ruido. Por lo visto, ha dejado atrás el tema de los pingüinos y ahora pinta de colores los planetas.
Enlace: No kicking penguins (How one boy's simple message is making its way around the planet).
Fogonazos.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario