La pandemia de COVID-19 también nos ha impuesto una nueva realidad: hemos incorporado a nuestros objetos cotidianos las mascarillas, los guantes y los geles desinfectantes. La mayoría de estos productos, necesarios por la situación extraordinaria que vivimos, son desechables, y nos pueden surgir dudas sobre cuál es la forma adecuada de gestionar estos residuos.
Lo primero de todo es concienciarnos de que no se pueden abandonar los guantes y mascarillas en mitad de la vía pública o en el campo. Son necesarios para proteger nuestra salud, pero protejamos también la salud de nuestro entorno. El Proyecto Libera, una alianza formada por Ecoembes y SEO/BirdLife, ya ha alertado de la proliferación de residuos de este tipo: “se pide a la ciudadanía que cuiden la salud del planeta, evitando el abandono de guantes y mascarillas que pueden acabar en los espacios naturales. Diferentes estudios indican que algunos patógenos, y entre ellos los virus, pueden utilizar las basuras como vector para su expansión”.
¿Dónde se deposita cada tipo de residuo?
Las instrucciones sobre gestión de residuos durante la situación de crisis sanitaria ocasionada por la COVID-19 viene regulada por el Ministerio de Sanidad en la Orden SND/271/2020, publicada en el Boletín Oficial del Estado el 22 de marzo.
“Los guantes y las mascarillas deben depositarse en el contenedor de descarte, que es de color gris o verde según el municipio”, nos explica Raquel Casado García, licenciada en Ciencias Ambientales y teniente alcalde de Infraestructuras, Urbanismo y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Montilla (Córdoba). Este es el contenedor al que van todos los residuos que no tienen un contenedor específico de reciclaje o se llevan al punto limpio, así como los residuos orgánicos en el caso de municipios que no tienen implantada la fracción orgánica (contenedor marrón).
En el caso de los botes de geles hidroalcohólicos y otros productos desinfectantes, estos se tratan como productos de limpieza y por tanto se tiran en el contenedor de envases (amarillo), no es necesario llevarlos al punto SIGRE para el reciclaje de medicamentos.
Para casos de coronavirus
Las indicaciones son un poco diferentes para el caso de personas que se encuentren haciendo cuarentena en su domicilio por padecer o haber padecido la COVID-19. “Esas personas tienen que estar aisladas en una habitación. Los residuos que están en contacto directo con estas personas o que hayan manipulado, como por ejemplo las servilletas, se deben recoger en una bolsa situada en ese misma habitación”, nos explica Casado. “Esta bolsa se cierra y se deposita a su vez en una segunda bolsa que se encuentra en la puerta de la habitación y en la que se depositan también los guantes y material empleado por la persona que atienda al paciente”. La segunda bolsa se cierra bien y se ya se puede meter en la papelera que se tenga en el domicilio para la basura que se tira en el contenedor gris o verde.
“En algunos sitios con especial incidencia de coronavirus cabía también la posibilidad de habilitar contenedores específicos para estos residuos”, nos explica la experta. “Nosotros, por ejemplo lo hemos hecho en una residencia de ancianos que fue el principal foco en nuestro pueblo. En este caso se habilitaron unos contenedores específicos en los que se echan esas segundas bolsas y que se consideran residuos sanitarios, por lo que reciben un tratamiento especial”.
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