Bruselas.- La Comisión Europea señaló este miércoles que la recuperación de las poblaciones de peces en la Unión Europea muestra “avances” pero llamó a hacer “más esfuerzos para construir un sector resiliente” y auguró un año de buen rendimiento económico tras las “pérdidas generales” de 2022 por los altos precios de la energía.
“La sostenibilidad general de las pesquerías de la UE ha mejorado y menos poblaciones están sobreexplotadas”, señaló el Ejecutivo comunitario en una comunicación dirigida a los Estados miembros y al Parlamento Europeo, en la que Bruselas hace balance del estado del sector y plantea orientaciones para 2024.
En concreto, las poblaciones en el Atlántico nororiental se encuentran “generalmente dentro de rangos saludables”, y la última evaluación apunta a “los mejores resultados de sostenibilidad hasta el momento”, indicó la Comisión.
El Ejecutivo comunitario destacó el ejemplo “particularmente positivo” del golfo de Vizcaya, que “en la última evaluación de 2021 se convirtió en la primera zona marítima de la UE sin poblaciones sobreexplotadas”.
“Esto demuestra que las decisiones de gestión sostenible de la pesca de la UE están dando sus frutos”, subrayó la Comisión.
En el Mediterráneo y el Mar Negro, aunque las poblaciones “se están recuperando lentamente, la mortalidad por pesca sigue planteando dificultades”.
“La tasa de mortalidad por pesca para 2020, los últimos datos disponibles, es la más baja hasta el momento, pero todavía está un 71% por encima de la tasa de sostenibilidad recomendada”, precisó la Comisión.
En cuanto al Báltico, la situación sigue siendo “desafiante, ya que otras presiones además de la pesca afectan a las poblaciones de peces”, señaló el Ejecutivo comunitario, que “seguirá tomando medidas para abordar todas las diversas presiones sobre las poblaciones de peces y ayudar a mejorar el estado de los ecosistemas”.
Industria pesquera
Más allá de los progresos, Bruselas subrayó que se necesitan “más esfuerzos para garantizar la resiliencia de las actividades pesqueras y la mejora continua del estado de las poblaciones de peces”.
En cuanto al estado del sector, la Comisión destacó que el alza de los precios de la energía en 2022 tuvo una fuerte incidencia sobre la industria pesquera, afectada antes por la pandemia de Covid-19, lo que llevó al sector a arrojar “pérdidas generales” por primera vez desde 2008.
Tras un récord de precios del combustible en 2022, Bruselas espera que, si los precios se mantienen estables en su nivel actual, la flota produzca “un valor añadido bruto de alrededor de 2.500 millones de euros y un beneficio bruto cercano a los 300 millones, con lo que podrán cubrir costes operativos y mantener los puestos de trabajo y salarios”. EFEverde
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